Noticias - Agentes no serán enjuiciados por proteger a narcos


Mairobi Herrera
Santo Domingo
Los tres oficiales expulsados hace unos días de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) bajo la acusación de proteger a narcos en la zona este del país no serán sometidos a la justicia porque no se les encontró droga. Los agentes, quienes pertenecen a la Policía Nacional, están en sus casas  hasta que el Poder Ejecutivo emita el decreto que autorice la cancelación de sus nombramientos.
La DNCD y la Policía señalaron que al teniente coronel Manuel Isaac José Polanco,  al primer teniente Máximo Ramírez Eustaquio y al segundo teniente Elvin Fulgencio Calderón, no les encontraron  pruebas suficientes para ser llevados ante el ministerio público, ya que sólo la DNCD tuvo información de que ellos vigilaban que el tráfico de droga se realizara sin inconvenientes.
La DNCD es un organismo que recluta policías, militares y civiles para lidiar contra el narcotráfico en el país. Sin embargo, en caso de que el miembro sea policía o militar, el organismo no puede anular el nombramiento de la institución de la que proviene. No obstante, el portavoz policial, Máximo Báez Aybar, aseguró que los tres hombres también han sido suspendidos de la institución del orden.
Báez Aybar explicó que en caso de que el ministerio público realice una acusación formal en contra de Polanco, Ramírez Eustaquio y Fulgencio Calderón, entonces, sí serán sometidos a la justicia.
Académicos
El presidente de la DNCD, mayor general Rolando Rosado Mateo, conoce a José Polanco desde que era un cadete en la academia policial “2 de Marzo”, en San Cristóbal. Los otros dos oficiales también son académicos, de 34 y 35 años de edad, según la DNCD.
A los tres se les atribuye haber escoltado en San Rafael de Yuma a  miembros de una red para recibir un cargamento de cocaína.
Entre los miembros de esa red figuran los civiles Carlos Eusebio Abreu, Juan Ramón Alberto Guerrero, Luis Manuel Polanco Hiciano y Nerio Olivo García García, precisó la DNCD. Según el informe, los oficiales y civiles fueron capturados durante una operación puesta en marcha por la Unidad Élite de la DNCD, junto a oficiales de la DEA de Estados Unidos. José Polanco ingresó a esa institución como inspector de la División Regional Sureste, con sede en La Romana, y de ahí pasó a Baní.

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