Después de que la marcha de Twitter de Zelda, la hija de Robin Williams, incendiase internet y las redes sociales, el departamento de fiabilidad y seguridad prometió que se tomarían medidas. Y es que la joven comenzó a recibir horas después de la muerte de su padre innumerables imágenes photoshopeadas, muy desagradables y enviadas por algunos de los trolls que abundan en la red social.
El vicepresidente de el departamento anunció que "no tolerarían abusos de esta naturaleza en Twitter", ya anunció que estaban "en proceso de reevaluar cómo mejorar sus políticas para gestionar mejor situaciones trágicas como esta, aumentando su apoyo a los familiares de los fallecidos para que no tengan que lidiar con momentos así".
Así que con el objetivo de respetar la privacidad de nuestros seres queridos, el servicio de microblogging ha anunciado que eliminará las imágenes de familiares fallecidos, sean o no usuarios, a petición de los usuarios. Esto quiere decir que el usuario solicitará la eliminación, y en Twitter estudiarán cada caso individualmente.
Esto tiene como objetivo agilizar la detección de trolls y demás calaña, que se valen de las redes sociales para causar el máximo perjuicio posible. Y es que el proceso que va desde que una cuenta se denunciaba hasta que se bloqueaba el usuario era demasiado largo, especialmente en este tipo de situaciones que requieren agilidad.
Esto no significa que Twitter haya automatizado el sistema de eliminación de perfiles, ni que sus usuarios se vayan a ver envueltos en una política de privacidad injusta que les vaya a vetar sus comentario sardónicos. La única novedad es que ahora las fotografías de fallecidos serán denunciables ante la red social, y que según parece tendrán prioridad a la hora de ser evaluadas como contenido inapropiado.
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