Según el CEO de Microsoft, la mujer solicita un aumento no tiene buen karma
Satya Nadella, el CEO de la empresa Microsoft, ha hecho unas declaraciones diciendo que las mujeres que no piden un aumento de sueldo son de fiar y tendrán buena suerte en lo que hagan. Pero no solo dijo algo que estaba totalmente fuera de lugar sino que eligió el peor de los auditorios para hacerlo: lo hizo en medio de una conferencia que rendía homenaje a las mujeres del mundo de la informática, en el Grace Hopper Celebration of Women in Computing de Arizona.
La triste realidad es que en la mayor parte de los países, las mujeres ganan menos que los hombres aún y cuando tienen más o igual responsabilidades y más o igual capacitación para desempeñar el trabajo. Estados Unidos no es la excepción a lo anterior y, ante la respuesta de Nadella, el auditorio no reaccionó de la mejor manera posible(como es normal).
Tras las quejas de todo el auditorio y de las redes sociales ante semejante declaración, el CEO de Microsoft escribió en su cuenta te Twitter diciendo que había sido “inarticulado con respecto al tema de cómo una mujer debe pedir un aumento salarial”. Como le preguntó una persona en Twitter “¿Usted está diciendo de alguna forma que las mujeres deben confiar en el sistema que creó la corrupción?”. Nadella no respondió más.
Unas desacertadas declaraciones en un mal lugar
Pero además de eso también le preguntaron “¿Qué le aconsejaría a las mujeres que están interesadas en avanzar en su carrera pero no se sienten cómodas con pedir un aumento de sueldo?” y su respuesta fue “en realidad no se trata de pedir un aumento sino de saber y tener la fe de que el sistema eventualmente te dará el aumento conforme sigas adelante. Las mujeres que no piden un aumento tienen un ‘súper poder’ porque no pedir aumentos es tener buen karma, que regresará… ese es el tipo de personas en las que yo quiero confiar”.
Como apuntan desde Time, en contraste con lo que había declarado Nadella, la moderadora de la charla, Maria Klawe (miembro de la Junta Directiva de Microsoft) reaccionó inmediatamente diciendo que las mujeres deben pedir lo que merecen y que “no deben ser estúpidas como yo, que cuando fui contratada como Decano de Ingeniería de la Universidad de Princeton me enteré que ganaba 50.000 dólares menos por año que lo que debería”.
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