l concepto de la aplicación no podría ser más sencilla: una plataforma de intercambio de vídeos que funcionase de manera independiente del Skype tradicional y que proporcionase una nueva experiencia de chat en vídeo. Obviamente, teniendo en cuenta que se iba a utilizar en un smartphone, tendrían que bajar su volumen de consumo de datos.
Y es que ese es uno de los principales problemas de Skype: salvo que haya una conexión WiFi, o se trate de una emergencia, pocos son los que se comunican a través del servicio de videollamadas que puede dejar seca su tarifa de datos en pocos minutos. Por eso el público terminaba confiando en la ligereza del texto de apps como Whatsapp.
Así que, desde este punto de vista, es buena idea crear una aplicación que no pese tanto, y que nos permita enviar vídeos de una manera fácil y rápida. Claro que hay veces en las que no es posible ponerse a grabar un vídeo para contestar: "Te hablo luego que estoy en el baño", por ejemplo.
Para estos casos, Qik ha incorporado la posibilidad de enviar mensajes pregrabados. Y para los más inseguros: La app borra todos los vídeos a las dos semanas de su creación, y permite eliminar los mensajes enviados tanto si se han visto como si no. Una ventaja significativa, teniendo en cuenta cómo hace poco vivíamos el Snappening.
1 Comentarios
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ResponderEliminarFujitsu Laptops