La juventud Dominicana esta perdiendo los valores morales y de convivencia.
Definir el término juventud sonara algo
sencillo, todo dependerá de la cultura o el entorno social al que pertenezca,
lo cierto, es que la juventud es una etapa transitoria de cada ser
humano, donde busca definir su personalidad y tomar las decisiones más importantes
de la vida.
La Juventud Dominicana desde muy temprano
empiezan a cumplir roles que los lleva a convertirse en un adulto prematuro.
Carentes de valores educativos e información, sobreviven con lo poco que les
brinda el entorno, en muchas ocasiones se encuentran en dificultades
empujándolos a caer en actitudes depresivas, como drogas, alcohol y violencia
familiar. Y no es necesario el mucho teorizar para comprender las razones
de esta situación. Los dominicanos tienden a no darle mucha importancia a
cuestiones, como los modos de vida, y la falta de dialogo dentro
de las familias.
La falta de oportunidades y de conciencia, la
mala educación o carencia de la misma, la marginación y la ambición, son
factores fundamentales para entender la inclinación de los jóvenes, en su
mayoría de bajos recursos, a lanzarse al mundo a delinquir. La gran monarquía
política que dirige el país, no piensan en que la juventud es el relevo y
futuro de la nación.
¿Hacia dónde va la juventud dominicana?.
Rumbo a un abismo perdido, lo cierto es que se debería de prestar más atención
y ver si somos capaces de invertir esta situación. Tratar de recuperar los
valores y que se puedan trazar proyectos de vida útiles para el país y su
entorno. Por consiguiente esto implica la participación de todos los
sectores de la sociedad, esto es una tares que ha de iniciarse en los hogares,
abriendo el dialogo, en los centros educativos y en el estado para que estos no
se desvíen en el camino del progreso.
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